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Durante muchos años, los usuarios de Windows tuvieron que recurrir a aplicaciones de terceros para obtener un monitoreo preciso del rendimiento de sus ordenadores.
Frente a este panorama, Microsoft tuvo que dar un paso adelante impulsando una actualización innovadora para el Administrador de Tareas de Windows 11.
¿Qué promete esta actualización? Unificar y mejorar la forma en que se muestra el uso de la CPU, acercándose a la precisión de las herramientas de terceros.
El problema histórico en Windows
Históricamente, el Administrador de Tareas de Windows ha mostrado inconsistencias en las métricas de uso de la CPU, situación que ha llevado a muchos usuarios a buscar alternativas más confiables.
De hecho, esta fragmentación en la visualización de datos dificultó siempre el diagnóstico preciso del rendimiento del sistema.
¿Cuál sería la solución de Microsoft?
La realidad nos indica que, con la nueva actualización, Microsoft pretende unificar el cálculo de la utilización de la CPU en las pestañas de Procesos, Rendimiento y Usuarios.
Esto proporcionará una visión más coherente y precisa del rendimiento del procesador, eliminando las discrepancias que antes eran comunes.
¿Qué cambia exactamente?
Esta nueva actualización unifica el sistema de cálculo del uso de la CPU, ofreciendo cifras más precisas y consistentes en todas las secciones del Administrador de Tareas.
Asimismo, el nuevo sistema de cálculo se acerca a la precisión de las aplicaciones de terceros, proporcionando a los usuarios una visión más confiable del rendimiento de su CPU.
No obstante ello, en Redmond mantienen la opción de utilizar el método de visualización anterior a través de la pestaña «detalles«, opción que permite a los usuarios elegir la forma en que prefieren monitorear su CPU.
Disponibilidad
Por el momento, esta actualización se encuentra disponible solamente para los miembros del programa Insider de Windows 11.
Aún así, se espera que en las próximas semanas o meses se lance una versión estable para el público general.
Ahora bien, esta actualización del Administrador de Tareas de Windows 11 representa un avance significativo en la forma en que los usuarios pueden monitorear el rendimiento de sus ordenadores.
Por consiguiente, con la unificación de métricas y la mejora en la precisión del cálculo del uso de la CPU, Microsoft está cerrando la brecha con las aplicaciones de terceros y proporcionando a los usuarios una herramienta más confiable y eficaz.
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(S.M.C)